domingo, 8 de agosto de 2010

Tal vez a medida que crecemos nuestras cosas van cambiando trágicamente. El que ayer creías que era tu amigo incondicional; hoy es que más te lástima, la gente que más te divertía; hoy es la que más te aburre, las promesas de aquel día; ya se las llevo todas el viento, las personas que admirabas, hoy sentís por ellas un gran desprecio, y así con muchas otras cosas.No se sabe porque, a veces el destino que teníamos en mente desde hace ya mucho tiempo, cambia, repentinamente. Pasa a ser totalmente diferente de un segundo al otro, es casi un flash y listo, tenes que aceptar casi a la fuerza la nueva realidad que antes veías muy lejos, es más, ni veías.Hay gente que no cambia. Los cambios son una elección, y uno no puede elegir cambiar a una persona, pero si puede elegir cambiar uno mismo. Por lo tanto al lugar de donde te quieren cambiar, no deberías volver… ¿Para que estar en un sitio sin poder ser uno mismo? Las personas se aceptan como son, no vas a elegir una amiga y querer cambiarle la costumbre de celarte, no vas a elegir un novio y querer cambiarle algún que otro aspecto que a vos te disguste, o simplemente con cualquier compañero de vida, lo aceptas o lo dejas, en el momento. No lo tomas con la certeza de que vas a manipular y lastimar, porque por más que sea diferente, hay una cosa que todos tenemos. Sentimientos. Y esa persona, no deja de sentir. No deja de sentirse abandonada cuando alguien o algunos, la ignoran.No deja de hundirse en un mar de “porqués?” No deja de llorar cuando descubre la triste noticia de que las relaciones, no son para siempre, y que aquel que sentía tan cercano como un hermano, hoy, le esta fallando. La vida, aunque a veces cueste creerlo, tiene un efecto boomerang (todo lo que va, vuelve) No esta bien gozar del sufrimiento ajeno, no esta bien sentirse bien por eso. Entonces la que va a tener que cambiar acá sos vos. Vas a tener que cambiar esa maldita costumbre de creer que las cosas son como vos queres o como vos crees y que no hay otra manera de entenderlas o aceptarlas. Pero como ya dije antes, el cambio, es una elección. Así que vos elegís, como elegis tantas cosas.